NL
IT
FR
ES
EN
DE
DA
Cuentos de Andersen
Cuentos e historias de Hans Christian Andersen
andersenstories.com
|
inicio
Cuentos de Andersen
Cuentos más famosos
Lista de cuentos
Lista completa
Lista alfabética
Cuento al azar
Inglés
Cuentos de Grimm
Andersenstories.com
Translations in other languages are welcome
Please send them to
info@andersenstories.com
Grimmstories.com
El gato y el ratón hacen vida en común
Los hermanos Grimm →
El lobo y la siete cabritillas
Los hermanos Grimm →
Blancanieves
Los hermanos Grimm →
Cuentos de hadas e historias de Andersen
Lista de cuentos (Página 1)
lista completa
página siguiente
1
2
3
4
5
6
7
001
El yesquero
Por la carretera marchaba un soldado marcando el paso. ¡Un, dos, un, dos! Llevaba la mochila al hombro y un sable al costado, pues venía de la guerra, y ahora iba a su pueblo. Mas he aquí que se encontró en el camino con una vieja bruja. ¡Uf!, ¡qué espantajo!, con aquel labio inferior que le colgaba hasta el pecho. ¡Buenas tardes, soldado! le dijo.
Lea la historia →
002
Colás el Chico y Colás el Grande
Vivían en un pueblo dos hombres que se llamaban igual: Colás, pero el uno tenía cuatro caballos, y el otro, solamente uno. Para distinguirlos llamaban Colás el Grande al de los cuatro caballos, y Colás el Chico al otro, dueño de uno solo. Vamos a ver ahora lo que les pasó a los dos, pues es una historia verdadera.
Lea la historia →
003
La princesa del guisante
Érase una vez un príncipe que quería casarse con una princesa, pero que fuese una princesa de verdad. En su busca recorrió todo el mundo, mas siempre había algún pero. Princesas había muchas, mas nunca lograba asegurarse de que lo fueran de veras; cada vez encontraba algo que le parecía sospechoso. Así regresó a su casa muy triste, pues estaba empeñado en encontrar a una princesa auténtica.
Lea la historia →
004
Las flores de la pequeña Ida
- ¡Mis flores se han marchitado! -exclamó la pequeña Ida. - Tan hermosas como estaban anoche, y ahora todas sus hojas cuelgan mustias. ¿Por qué será esto? -preguntó al estudiante, que estaba sentado en el sofá.
Lea la historia →
005
Pulgarcita
Érase una mujer que anhelaba tener un niño, pero no sabía dónde irlo a buscar. Al fin se decidió a acudir a una vieja bruja y le dijo: - Me gustaría mucho tener un niño; dime cómo lo he de hacer. - Sí, será muy fácil -respondió la bruja-. Ahí tienes un grano de cebada; no es como la que crece en el campo del labriego, ni la que comen los pollos. Plántalo en una maceta y verás maravillas.
Lea la historia →
006
El niño travieso
Érase una vez un anciano poeta, muy bueno y muy viejo. Un atardecer, cuando estaba en casa, el tiempo se puso muy malo; fuera llovía a cántaros, pero el anciano se encontraba muy a gusto en su cuarto, sentado junto a la estufa, en la que ardía un buen fuego y se asaban manzanas.
Lea la historia →
007
El compañero de viaje
El pobre Juan estaba muy triste, pues su padre se hallaba enfermo e iba a morir. No había más que ellos dos en la reducida habitación; la lámpara de la mesa estaba próxima a extinguirse, y llegaba la noche. - Has sido un buen hijo, Juan -dijo el doliente padre-, y Dios te ayudará por los caminos del mundo -.
Lea la historia →
008
La sirenita
En alta mar el agua es azul como los pétalos de la más hermosa centaura, y clara como el cristal más puro; pero es tan profunda, que sería inútil echar el ancla, pues jamás podría ésta alcanzar el fondo. Habría que poner muchos campanarios, unos encima de otros, para que, desde las honduras, llegasen a la superficie.
Lea la historia →
009
Los vestidos nuevos del emperador
Hace de esto muchos años, había un Emperador tan aficionado a los trajes nuevos, que gastaba todas sus rentas en vestir con la máxima elegancia. No se interesaba por sus soldados ni por el teatro, ni le gustaba salir de paseo por el campo, a menos que fuera para lucir sus trajes nuevos.
Lea la historia →
010
Los chanclos de la suerte
1. Cómo empezó la cosa En una casa de Copenhague, en la calle del Este, no lejos del Nuevo Mercado Real, se celebraba una gran reunión, a la que asistían muchos invitados. No hay más remedio que hacerlo alguna vez que otra, pues lo exige la vida de sociedad, y así otro día lo invitan a uno.
Lea la historia →
011
La margarita
Oid bien lo que os voy a contar: Allá en la campaña, junto al camino, hay una casa de campo, que de seguro habréis visto alguna vez. Delante tiene un jardincito con flores y una cerca pintada.
Lea la historia →
012
El intrépido soldadito de plomo
Éranse una vez veinticinco soldados de plomo, todos hermanos, pues los habían fundido de una misma cuchara vieja. Llevaban el fusil al hombro y miraban de frente; el uniforme era precioso, rojo y azul. La primera palabra que escucharon en cuanto se levantó la tapa de la caja que los contenía fue: "¡Soldados de plomo!." La pronunció un chiquillo, dando una gran palmada.
Lea la historia →
013
Los cisnes salvajes
Lejos de nuestras tierras, allá adonde van las golondrinas cuando el invierno llega a nosotros, vivía un rey que tenía once hijos y una hija llamada Elisa.
Lea la historia →
014
El elfo del rosal
En el centro de un jardín crecía un rosal, cuajado de rosas, y en una de ellas, la más hermosa de todas, habitaba un elfo, tan pequeñín, que ningún ojo humano podía distinguirlo. Detrás de cada pétalo de la rosa tenía un dormitorio. Era tan bien educado y tan guapo como pueda serlo un niño, y tenía alas que le llegaban desde los hombros hasta los pies.
Lea la historia →
015
El Jardín del Paraíso
Érase una vez un príncipe, hijo de un rey; nadie poseía tantos y tan hermosos libros como él; en ellos se leía cuanto sucede en el mundo, y además tenían bellísimas estampas. Hablábase en aquellos libros de todos los pueblos y países; pero ni una palabra contenían acerca del lugar donde se hallaba el Paraíso terrenal, y éste era precisamente el objeto de los constantes pensamientos del príncipe.
Lea la historia →
016
El cofre volador
Érase una vez un comerciante tan rico, que habría podido empedrar toda la calle con monedas de plata, y aún casi un callejón por añadidura; pero se guardó de hacerlo, pues el hombre conocía mejores maneras de invertir su dinero, y cuando daba un ochavo era para recibir un escudo. Fue un mercader muy listo... y luego murió.
Lea la historia →
017
Las cigüeñas
Sobre el tejado de la casa más apartada de una aldea había un nido de cigüeñas. La cigüeña madre estaba posada en él, junto a sus cuatro polluelos, que asomaban las cabezas con sus piquitos negros, pues no se habían teñido aún de rojo.
Lea la historia →
018
El principe malvado
Érase una vez un príncipe perverso y arrogante, cuya única ambición consistía en conquistar todos los países de la tierra y hacer que su nombre inspirase terror. Avanzaba a sangre y fuego; sus tropas pisoteaban las mieses en los campos e incendiaban las casas de los labriegos. Las llamas lamían las hojas de los árboles, y los frutos colgaban quemados de las ramas carbonizadas.
Lea la historia →
019
Pegaojos (Ole Luköie)
En todo el mundo no hay quien sepa tantos cuentos como Pegaojos.
Lea la historia →
020
El porquerizo
Érase una vez un príncipe que andaba mal de dinero. Su reino era muy pequeño, aunque lo suficiente para permitirle casarse, y esto es lo que el príncipe quería hacer. Sin embargo, fue una gran osadía por su parte el irse derecho a la hija del Emperador y decirle en la cara: - ¿Me quieres por marido? - Si lo hizo, fue porque la fama de su nombre había llegado muy lejos.
Lea la historia →
Los cuentos más famosos de Andersen
Cuentos más famosos →
lista completa
página siguiente
1
2
3
4
5
6
7